Es la imagen viva de la fortaleza y el espíritu tenaz de la cría colegial. También arranca suspiros de ternura entre su fans, principalmente los estudiantes. Se trata de Tarzán, el perro bulldog, mascota del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), cuyo símbolo de fuerza acompaña a esta institución por los últimos 75 años. De acuerdo con el doctor Fred Soltero Harrington, segundo rector del RUM, la idea de tener una mascota que representara los estudiantes, especialmente los atletas, surgió en ocasión de las Justas de la Liga Atlética Interuniversitaria (LAI) de Puerto Rico, cuando solo competían tres universidades: la Universidad de Puerto Rico (UPR) en Río Piedras, el otrora Colegio de Agricultura y Artes Mecánicas de Mayagüez, y el Instituto Politécnico, ahora Universidad Interamericana de Puerto Rico.
“El Colegio no tenía una identificación como tal y había un profesor de la Clase del 1935, que fue el primero que sugirió que ‘si los de la IUPI son Gallitos, nosotros vamos a ser los Tarzanes’, porque en esa época estaban de moda las películas de Tarzán y de Jane y Tarzán era el símbolo del machismo, y del atleta y ahí fue que se adoptó que los estudiantes colegiales, los atletas eran los Tarzanes del Colegio”, contó. Pero, ¿qué animal iba a representar esa fortaleza? Según rememoró Soltero Harrington, a mediados de la década del 40, los profesores Libertario Avilés y Héctor Huyke establecieron la analogía con el carácter y la imagen que proyectaba Winston Churchill, el primer ministro de Inglaterra en aquel entonces y a quien los rusos habían apodado el bulldog británico. Así surgió que el mencionado can se convirtiera en mascota del Colegio y arribara al campus mayagüezano de la UPR cerca de 1950. “Cuando lo trajeron, eso fue una celebración que hasta una parada en el pueblo se hizo con la Banda del Colegio para presentarle a la gente el Tarzán original”, recordó. Sin embargo, ese primer Tarzán no vivió mucho tiempo y hubo que sustituirlo, gestión que siempre se ha hecho con mascotas de carne y hueso, con excepción del año 1967, cuando ocurrió el deceso de Tarzán II y no había mascota para las Justas de la LAI. “No teníamos la mascota para ese momento y entonces los estudiantes se idearon hacer una de papel maché grandísimo”, explicó el doctor Soltero. El resultado fue una gigantesca escultura de más de diez pies de alto y 80 libras, cuya afable sonrisa aún hace las delicias de los más de 12 mil estudiantes colegiales, y que en aquel momento acompañó a los atletas del Colegio a las Justas por unos pocos años, hasta que llegó el nuevo perro.
Por su parte, Jane también ha tenido su puesto en el Recinto como eterna compañera de Tarzán y como símbolo de fuerza de las Juanas. Según relató el cuidador de las mascotas colegiales, Carlos Díaz Piferrer, la primera Jane fue donada al RUM en la década de 1970 durante la rectoría de Rafael Pietri Oms.
“Pero, hemos tenido muy mala suerte con las Janes por razones de problemas cardíacos”, añadió el también fotográfo del Recinto. De hecho, Jane VIII, quien era la compañera de Tarzán X, actual mascota del RUM, murió por complicaciones de parto el pasado año.
Mientras, Tarzán X llegó en diciembre de 2003 procedente de una familia de perros campeones criados en el estado de Texas, según informó Díaz Piferrer. Precisamente, sus hijas, las gemelas Margarita y Milagros, también estudiantes del RUM, tienen la mayor tarea en cuanto al cuido de la mascota se refiere.
“Tarzán hasta duerme en su cuarto con ellas en aire acondicionado”, precisó. Todo ese gran cariño y atenciones de las que es objeto Tarzán -hasta fue bautizado en una misa oficiada por el sacerdote Edwin Lugo hace seis años- hacen que el gran perro conserve una bonachona expresión, que aunada a su innata nobleza, lo convierten en el querendón de todos los colegiales y, ¿por qué no?, además lo hacen ser la mascota favorita de las Justas. “El Poli tiene un tigre, pero no lo puede enseñar porque se come la gente, le hace daño, es una animal feroz. Éste es un animal dócil, un animal hermoso, es un animal amigable… El gallo, como tiene espuelas, pelea y te clava las espuelas, pues es un problema”, apuntó Díaz con su característica energía. De igual forma se expresó, el rector del RUM, doctor Jorge Iván Vélez Arocho, al sostener que Tarzán representa el estado de juventud del Colegio de Mayagüez, institución que se apresta a cumplir sus 100 años de fundación en septiembre de 2011. “Representa también a nuestros estudiantes atletas cuando piensan en sus competencias, lo hacen por el Colegio y por Tarzán, que los representa”, puntualizó. Para acceder al texto original puede visitar: http://www.uprm.edu/news/articles/as2009059.html