VEGA BAJA – A la hora de estrechar lazos de ayuda comunitaria la distancia es lo de menos. Por ejemplo, puedes ser un o una joven de Francia y terminar ayudando a un niño o una niña de un barrio pobre en la costa norte de Puerto Rico, haciendo trabajo en un huerto de su comunidad. Normal, como diría la juventud.
Con eso en mente, un grupo de 12 estudiantes de pre ingeniería del Liceo Saint Joseph Pierre Rouge Mont, de la ciudad de Montpelier, en el Sur de Francia, arribó el lunes pasado al archipiélago borincano. Los y las jóvenes, entre las edades de 18 y 19 años, son alumnos del programa de Ciencia Tecnología de Industrias y Desarrollos Sustentables que ofrece el prestigioso liceo francés.
Han llegado a Puerto Rico en un esfuerzo de intercambio propulsado por el colegio TASIS de Dorado y por las entidades sin fines de lucro VIDAS (Vegabajeños Impulsando Desarrollo Ambiental Sustentable) y Sinergía Los Naranjos.
Esta última entidad fue fundada el año pasado por varios líderes comunitarios para atender mediante la autogestión las distintas necesidades del Barrio Los Naranjos, una comunidad tradicionalmente marginada en Vega Baja, que por décadas ha enfrentado problemas de infraestructura, como inundaciones, además de otros dilemas sociales como deserción escolar y pobreza extrema.
Mediante un intercambio con TASIS Dorado, han logrado rescatar varios espacios en la comunidad, entre ellos el viejo espacio de la Escuela Anselmo Soler Muriel, una de las muchas que fue abandonada por el Departamento de Educación durante el cierre de planteles el cuatrienio pasado. Además, han desarrollado un huerto comunitario y trabajan para ofrecer sistemas de energía sustentable y de recogido de agua de lluvia.
Así las cosas, el barrio Los Naranjos recibió ayer martes al grupo de estudiantes franceses, que durante las próximas dos semanas participarán en varias actividades de labor comunitaria y de desarrollo y aprendizaje de destrezas junto a miembros de TASIS, de VIDAS, de Sinergia Los Naranjos y del Municipio de Vega Baja.
“Es un intercambio cultural entre comunidades del cual nos nutrimos mutuamente”, le dijo a Diálogo Ricardo Laureano, uno de los líderes del grupo VIDAS.
Laureano es un investigador de arrecifes que durante los pasados años ha realizado importante contribuciones en la conservación y desarrollo de la variada población de corales que hay en el área. De hecho, programado entre las actividades que los jóvenes franceses realizarán en Vega Baja está la investigación y siembre de corales.
“Estos estudiantes franceses también han venido a aprender sobre la siembra de corales y a ayudarnos en el montaje del sistema de captación de agua, en la ampliación de los bancos del huerto comunitario y en el montaje de dos mesas grandes de hidroponía”, resumió Laureano.
En su primer día en Vega Baja, ayer lunes, el grupo multicultural trabajó en la siembra de corales del reparto El Lido, en el sector El Eco, aledaño al balneario Puerto Nuevo de este pueblo costero. Además, compartieron con los niños, las niñas y el resto de la comunidad en Los Naranjos.
Esta semana y la otra continuarán laborando en el mantenimiento de los corales, al igual que en distintas faenas en el barrio, de la mano de miembros de Sinergia Los Naranjos, VIDAS y TASIS Dorado.
“Esperamos que este sea el principio de muchos intercambios entre nuestra comunidades y otras, ya sean cercanas o en otros países”, resaltó Laureano.
Después de todo, el mundo no es tan grande na’.