El colectivo Madres de Negro se dio cita junto a otras organizaciones comunitarias y políticas en los predios del Capitolio para llevar a cabo una manifestación en contra de la costrucción del proyecto de un incinerador de basura en la zona.
La convocatoria del colectivo, que pertenece al Frente Amplio de Arecibo contra el Gasoducto y el incinerador, exigió a la legislatura que investigue las irregularidades que según ciertas organizaciones reúne el proyecto.
Según Teresa Sanchez, portavoz del colectivo, la preocupación de esta organización surge del hecho de que se prevé que la ubicación del incinerador estará a menos de dos millas del casco urbano de Arecibo, por lo cual más de quince "head starts", veinte escuelas públicas y privadas, cuatro hospitales y cuatro égidas de ancianos, recibirán las emanaciones de ceniza y toxinas del aparato.
“Este proyecto es nefasto para nuestra salud. Nosotras estamos muy preocupadas pues estas cenizas afectan la salud de nuestro pueblo. No sólo de Arecibo, sino que los vientos alisios provocarán que se afecte toda el área oeste y la isla.”, resaltó Sánchez.
Luego de una breve manifestación, miembros del Sierra Club intentaron entrar a los predios del Capitolio pero se les negó la entrada por portar camisas alusivas al movimiento que se llevó a cabo.
Entre las organizaciones presentes en el piquete se dieron cita el Sierra Club, el Movimiento de Unión Soberanista, Ciudadanos en Defensa del Ambiente y Ciudadanos del Karso entre otras personas de manera independiente.
El próximo miércoles, 9 de febrero dichas organizaciones realizarán un piquete en Arecibo para continuar uniendo adeptos a su causa.