“La renuncia de Luis Berríos Amadeo y Miguel Muñoz deben ser un primer paso hacia la transformación de la Institución. Damos la bienvenida a sus renuncias”.
Así se expresaron en conferencia de prensa conjunta representantes de la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU), la Hermandad de Empleados Exentos No Docentes (HEEND) y la Confederación Nacional de Asociaciones de Profesores Universitarios (CONAPU), ante la renuncia del presidente de la Universidad de Puerto Rico (UPR), Miguel Muñoz, y el presidente de la Junta de Síndicos, Luis Berríos Amadeo.
Sin embargo, las organizaciones indicaron que si bien había una necesidad de remplazar la alta jerarquía universitaria, condenan la forma en que se dio la gestión, explicando que se utilizaron las necesidades de la UPR para “cambiar de azul a rojo la Junta de Síndicos”.
Ana Matanzo, representante claustral ante la Junta de Síndicos y miembro de la APPU, expresó que la acción de intromisión por parte del cuerpo legislativo y el ejecutivo mediante la aprobación del Proyecto de la Cámara 927, el que elimina la Junta de Síndicos y establece una Junta de Gobierno, no es fundamentalmente indebida porque responde al reclamo de la comunidad universitaria. No obstante, Matanzo entiende que el proyecto cameral dejó fuera las recomendaciones que ofrecieron los cuerpos docentes, no docentes y estudiantiles.
Es precisamente ésta la denuncia de la APPU, la CONAPU y la HEEND, la exclusión de las enmiendas que sometieron al proyecto del ejecutivo para establecer una Junta de Gobierno en la UPR, entre ellas el crear un comité consultativo con representación de todos los sectores universitarios que ofreciera una lista de candidatos para la nueva Junta de Gobierno de la UPR y el que se estableciera un periodo de 18 meses para elaborar una propuesta de reforma universitaria.
José Torres, presidente de la HEEND, expresó que la comunidad universitaria “esperaba y espera más” del gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, así como de la senadora popular Maritere González y del presidente del Senado, Eduardo Bhatia, quienes según Torres, expresaron publicamente su interés en ayudar la Universidad.
“Ha sido un balde de agua fría y una falta de respeto del gobierno de Puerto Rico el papelón que jugaron los legisladores a la Universidad”, sostuvo Torres.
Por su parte, la senadora Maritere González, presidenta de la Comisión de Educación, Formación y Desarrollo del Individuo en el Senado, expresó en declaraciones a Metro que por la prisa dejaron fuera las enmiendas hechas por la comunidad universitaria, pero adelantó que presentará otro proyecto más adelante para enmendar el Proyecto de la Cámara 927 en aras de atender “sus reclamos y los de la comunidad universitaria”.