Llegaron los escandinavos, pero, ojo: ¿acaso nunca estuvieron?
Cuando salió la primera reseña de las novelas de Stieg Larsson en Puerto Rico, apenas salía de prensas el tercer volumen de la conocida «Trilogía Milenio» y ya para entonces se el fenómeno del autor sueco y su popularidad en Europa y América era ineludible. Larsson se acomodó, tras su súbita muerte, a la vanguardia de lo que comenzó a conocerse como la “Invasión escandinava”.
Otra figura sobresaliente en el panorama ha sido Henning Mankell, autor de El cerebro de Kennedy (2005), cuya obra hizo despertar a muchos editores hacia otras fronteras literarias donde la novela policíaca y el thriller se armaban como la nueva novela política. El mérito es comprobable.
No obstante, los escandinavos siempre han destacado con figuras como la de Hans Christian Andersen (sueco), conocido por sus relatos para niños, y Sigrid Undset (danesa), Premio Nóbel de Literatura de 1928. Sabemos también de Augusto Strindberg y de Henrik Ibsen, ambos confinados mayormente a los cursos de estudio teatral. Más recientemente, se ha sumado Jostein Gaardner, autor de El mundo de Sofía, el precursor de la novela negra de corte filosófico.
El éxito de la literatura escandinava reciente estriba en que han dispensado del encajonamiento y han comenzado a cruzar la novela de intriga con la alternancia literaria de la narrativa detectivesca, la novela filosófica, el romance y el comentario social taimado. Cada obra es como leer muchas obras simultáneamente, en paralelo y en sincronía. La apuesta al género híbrido que combina la profundidad del ejercicio intelectual con el misterio y la intriga típicos del género policíaco ha ganado lectores que, por ser inteligentes no se comprometen a ser muy formales, o en su defecto, aburridos.
Como es de anticiparse, los editores españoles –la Metropolis editorial siempre– se aprestan a preparar traducciones de los más recientes novelistas del género policíaco híbrido: Asa Larsson, Ola Hansson, Kjell Ola Dahl, Inger Wolf, Hakan Nesser, y sobre todo, Sofi Oksanen, novelista que destaca no solo por su talento, sino porque traza la vanguardia de este género en el que escasean las mujeres.