El deseo de darle un merecido espacio dentro de las artes y la cultura puertorriqueña a una de las mujeres que por mucho tiempo ha sido símbolo de la lucha independentista en nuestra Isla no fue el único factor que impulsó la puesta en escena de “Lolita”, sino que también estuvo presente la imperiosa necesidad de dar a conocer un aspecto histórico que usualmente pasa desapercibido en la educación del puertorriqueño: los años en que tantos nacionalistas que prestaron sus vidas en la defensa por la libertad de Puerto Rico.
Y es que, según expresara la actriz Viviana Torres Mestey, una de las grandes memorias que se lleva luego de haber interpretado a Dolores “Lolita” Lebrón en las tablas, es la manera en que los maestros se acercaban para ver cómo podían integrar esta parte de la historia en sus respectivas clases, puesto que tienen conciencia de que los currículos actuales, sobre todo los que involucran las clases de historia de Puerto Rico, dejan rezagados muchos capítulos importantes en la formación de nuestro país.
“Muchos maestros nos pedían consejos para ayudar a integrar esta información en sus currículos. Es importante, porque esta nueva generación sabe más de menos, es una generación de la especialización. Dentro de esa especialización que les dan en las escuelas vocacionales y hasta en las mismas universidades olvidan la historia y Lolita es un ejemplo de un personaje que no ha hecho demasiado ruido en nuestra historia. Hay muchos jóvenes que no conocen de ella ni de lo que pasó en el 1954”, explicó en una conversación con este medio.
Asimismo, Torres Mestey, de 26 años, comentó que esta puesta en escena apenas incluye los más de veinte años de Lebrón en la cárcel de Alderson, Virginia, y que, aunque no puede adentrarse en otras facetas de Lolita por cuestión de tiempo de extensión, no se descarta continuar con el proyecto como si fuese una especie de “saga” de la vida de la líder, que en 1954 dirigió a un grupo de cuatro nacionalistas en un tiroteo al congreso norteamericano. Este acto tenía el fin de llamar la atención internacional sobre el particular de la independencia puertorriqueña.
“Lolita era una mujer de muchas capas, dentro de ellas la madre. Más adelante queremos mostrar también esas facetas como Lolita la mujer, la poetisa”, sostuvo.
Se mostró, además, sumamente agradecida con la familia de Lebrón, especialmente con su hermana Aurea y su sobrina, Linda Alonso, que abrieron las puertas de su hogar para formar parte integral en su preparación para la obra. Este proceso duró alrededor de cuatro meses.
“Nos concedieron entrevistas, nos dieron información inédita que no está en internet. Hay pocos vídeos en Youtube y no hay documentales, aunque hubo intentos de iniciar algunos. Me nutrí mucho de la familia, de las historias y la información que nos daban. De los años en que estuvo presa hay menos documentación todavía, pero su familia nos comentó de los abusos contra ella, de los golpes, los baños en hielo (…) Nos dieron libros de los poemas que escribió en la cárcel y hasta información de sus hijos, que ambos murieron antes que ella” puntualizó.
Por el momento, luego de haberse presentado ante estudiantes y público general, el equipo de trabajo de esta obra se encuentra en negociaciones para presentarse de manera gratuita ante la comunidad universitaria de Puerto Rico, tanto en el sistema público como en el privado. Tampoco descartan presentar “Lolita” fuera de la Isla.
“El interés en el 2014 es presentar esta versión, que llegue a la mayor cantidad de gente posible. La familia ha estado interesada, quieren que, por favor, continuemos la obra. Falta mostrar la parte de Lolita presa en Vieques, muchas etapas más”, explicó Torres Mestey, para luego describir lo que considera uno de los momentos más emotivos luego de haberse presentado en el Centro de Bellas Artes en Santurce: la emoción de fundirse en un abrazo con la propia Aurea, la hermana de Lolita.
“Fue emocionante cuando al final del estreno me acerqué a su hermana. Estaba emocionada y llorando, porque la tenían olvidada y con este esfuerzo se vuelve a traer su vida a la palestra pública”, detalló.
De igual manera, la joven actriz aprovechó para destacar las iniciativas de muchos actores puertorriqueños en lo que respecta al teatro educativo, pues, según expresó, son muchos los esfuerzos que se realizan, a pesar de que los recursos no abundan. Hizo un llamado a que se apoye este tipo de iniciativa, pues el arte es una de las maneras más efectivas a la hora de poder contribuir a la cultura y la educación de un pueblo.
“Llevo doce años haciendo teatro en Puerto Rico y en festivales internacionales. Estos son esfuerzos que mucha gente no conoce porque si no estás en televisión no eres necesariamente conocida, pero la realidad es que se está haciendo mucho teatro popular y educativo”, dijo.
Por último, la actriz comenta que este papel ha marcado profundamente sus años de carrera artística, pues siente que ha sido un “trabajo profundo e icónico”, y que a pesar de los obstáculos que supone precisamente la falta de recursos, el resultado fue muy satisfactorio.
“Esto lo llevo muy cercano en mi corazón”, concluyó.
La autora es periodista.