Para Shariana y Vanesa
Calle del Parque, Santurce. Un amigo poeta posteó la foto del grafiti en Facebook. La imprimí y la pegué en la portada de mi Código Civil. En el interior, hice esta mini lista relámpago de abogados-poetas:
José de Diego
Luis Lloréns Torres
Hjalmar Flax
Ok, mátenme. Otro amigo poeta me hizo este chiste: ¿Cuál es la diferencia entre poetas y abogados? Que a los poetas con puestos en el Gobierno les pagan mucho más. Además, los poetas tienen un coeficiente de inteligencia más alto que el abogado promedio, ¿cierto? Lo cierto es que muy pocos abogados leen poesía. Pero montones la escriben. Pregunto, ¿habrá alguna relación entre la profesión jurídica y la mala poesía? Veamos:
“Parecería que las economías de los países del mundo se encuentran entrelazadas y atadas al rabo de una chiringa que no consigue finalmente elevarse”. Cito del primer párrafo de la opinión mayoritaria del Tribunal Supremo en Domínguez Castro v. ELA (2010), donde nuestro más alto foro declaró constitucional la Ley 7.
Hagamos de esa oración una estrofa:
“Parecería que las economías de los países del mundo
se encuentran entrelazadas
y atadas al rabo de una chiringa
que no consigue finalmente elevarse”.
Definitivo: la belleza no está en la forma, sino en el contenido. Entonces, ¿qué tal si hacemos de esta otra estrofa una ley?
“Ojalá cada boca humillada
con los dientes como lápidas profanadas
se colme con los ángeles de pan”.
Cito del poema Imagine the Angels of Bread del poeta-abogado Martín Espada. Más poeta que abogado. Ahí otra consigna para un grafiti. De hecho, se me ocurre, que un tremendo proyecto poético-político sería recorrer la ciudad en busca de grafitis para recopilar en un nuevo código civil. Artículo 1: Que el capitalismo y el patriarcado caigan juntos. Éste lo saqué de una foto en el perfil de una amiga. Ella no es poeta ni abogada. Pero esa es una línea digna del más hermoso poema, de la más urgente ley.
En la foto, ella posa desnuda con los brazos cruzados y una cara de tú no puedes conmigo. Hay una pared verde de fondo. En la pared, el grafiti en letras blancas y rojas, y un dibujo de una guerrillera de Chiapas con sus crías y un rifle. Parecería que las resistencias de los países del mundo se encuentran entrelazadas y atadas al rabo de una chiringa que se eleva.
Guillermo Rebollo Gil es ensayista, poeta, sociólogo, abogado y profesor universitario. También es parte del grupo de colaboradores permanentes de Diálogo Digital.