Estudiantes de ocho de las 11 unidades de la Universidad de Puerto Rico (UPR) repudiaron ayer las más recientes determinaciones tomadas por la administración universitaria, que incluyen aumentos salariales para algunos puestos de confianza en la Administración Central así como para el presidente interino de la institución, Darrel Hillman Barrera.
Los miembros de los movimientos estudiantiles de la UPR en Arecibo, Bayamón, Carolina, Cayey, Humacao, Mayagüez, Ponce y Río Piedras deploraron que en el caso de Hillman, el aumento es contrario a las normas establecidas por la institución, en específico la Certificación 90 del año académico 1996-1997, de la entonces Junta de Síndicos.
“El aumento en los puestos de confianza en el mencionado organismo institucional representa un incremento de sobre el 6.4% de su presupuesto, para un estimado de $19,178 mensuales; siendo el mayor aumento en el puesto del presidente”, repudiaron en declaraciones escritas.
“Es una falta de honestidad que el presidente de la Junta de Gobierno publicara un comunicado de prensa intentando desmentir el aumento de salario al presidente interino y otros puestos de confianza de presidencia”, señalaron.
El comunicado destaca que para el año fiscal 2017-2018 se ha propuesto aumentar salarios en más de mil dólares mensuales, mientras a los recintos se les recorta y se encarece el costo de los estudios.
“Los fondos deben ser para mejorar la experiencia del estudiantado y del profesorado en su salón de clases”, afirmó Kiria Hurtado del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM).
“Exigimos que desistan de las decisiones que van en contra del bienestar de la comunidad universitaria y comiencen a atender los asuntos importantes que han quedado pendientes”, agregó.
Por su parte, Carlos Bigay de la UPR en Bayamón, resaltó que “es vergonzoso el doble mensaje que se está enviando al país”.
“Primero se aparenta y anuncia que se han comenzado a disminuir los puestos de confianza y el presupuesto destinado para la Administración Central de la UPR y luego resulta que la aparente reducción implicaría el aumento en el salario del presidente interino y otros que forman parte de su equipo de trabajo”, declaró.
“En medio de la situación en la que se encuentra el país hay líderes de nuestras instituciones que en la cara del pueblo se lucran, mientras miles de familias ven sus fuentes de ingreso reducidas o en condiciones que no son dignas, lo cual se ve dentro de la misma universidad”, sostuvo Bigay.
Finalmente, Luis Torres, del Recinto de Río Piedras, añadió que casos como estos nos demuestran que aún no tenemos una universidad democrática y al servicio de las masas.
“Nos debe indignar que personas que piensan la UPR como un gasto social y una herramienta para el lucro personal, sean quienes ocupen en mayoría los puestos de gobernanza de dicha institución”, indicó Torres.
“Lamentablemente esto es un reflejo del sistema colonial y capitalista que vivimos, en donde los trabajadores y estudiantes que se esfuerzan para echar hacia adelante el país, no son quienes tienen el poder para tomar las decisiones políticas y económicas necesarias para sacarnos de la crisis que nos han impuesto desde que nacemos”, añadió.
Dijo que “es por esto que el movimiento estudiantil lucha por la transformación de la UPR y la educación pública en general”.
“No podemos permitir que se continúe visualizando la educación pública como una mera mercancía, una fábrica para producir más ganancias a las grandes corporaciones o un gasto que hay cortar para cuadrar caja, porque la educación es lo más accesible que aún queda para las personas más empobrecidas y no podemos permitir que se niegue el acceso a tan preciado tesoro”, subrayó.