En un ambiente familiar tranquilo, las paredes del vestíbulo del Museo de Historia, Antropología y Arte de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras fueron testigos de la manifestación de todo tipo de amor plasmado en acrílico sobre cambas.
En la primera parte de la actividad titulada “Arte con corazón”, se ofreció la historia del desarrollo de la imagen del corazón, desde los egipcios hasta tiempos modernos. Luego, los participantes tuvieron la oportunidad de crear una obra de arte pintada utilizando la imagen del corazón.
Esta iniciativa, llevada a cabo el pasado 14 de febrero, formó parte de los talleres dominicales gratuitos denominados “Domingos familiares”, que se realizan desde el 2010 en el Museo. “La idea es compartir el crear en familia”, explicó Olga Charneco, artista encargada del taller.
En el evento participaron personas de todas las edades, desde niños y jóvenes, hasta adultos y abuelos y las obras artísticas fueron tan variadas como sus artistas.
Algunos se inspiraron en el amor romántico, otros en el amor por la naturaleza y unos optaron dejar volar su imaginación y crear una obra abstracta, pero con mucho amor, como fue el caso de un niño con excepcionalidad intelectual.
Una de las parejas que participó fue Enrique Vélez y Wilmary Rosado, quienes eligieron venir al museo “para hacer algo diferente… algo especial”, sostuvo Rosado. La joven pareja hizo una obra de arte que se complementaba, ella pintó una mitad del corazón y él hizo la otra. El significado, según Vélez, es que “aunque estemos separados, cuando se junten siempre vamos a caer. Lo hicimos sin medir y sin nada y cuando los juntamos cayó”.
Por lo general, dijo Charneco, los temas de los talleres dominicales están relacionados con las exposiciones. Primero hacen un recorrido educativo por las exposiciones y después ofrecen el taller de creación.
No obstante, como la sala de exposiciones ha permanecido cerrada durante varias semanas, utilizan temas del entorno universitario como: la torre, la naturaleza, las esculturas del museo, entre otros.
Por otra parte, el joven Carlos Ramos, que fue acompañado por su papá y su sobrino, plasmó la imagen de Puerto Rico dentro de un corazón. Según dijo, se inspiró “en el amor que nos debe unir para enfrentar los momentos que estamos viviendo como país y verlo como una oportunidad para seguir hacia adelante y mejorar”.
Unas cuantas sillas a la derecha del joven estaba doña Ana Colón, un ejemplo vivo de que para el arte no hay edad, acompañada por sus dos hijas y su nieta. Doña Ana definió su pintura como “el corazoncito de mi esposo y mío, que aunque él no está conmigo (físicamente), está siempre”.
Cabe señalar que estos talleres también se ofrecen para las escuelas públicas en días de semana. “Siempre me ha gustado promover las artes en la comunidad en general y lo importante que es esa oportunidad para todos”, comentó Charneco.
El próximo taller se llevará a cabo el domingo 21 de febrero a la una de la tarde bajo el tema “Máscaras egipcias”. En el mismo se explorarán los diferentes aspectos de la cultura egipcia y, posteriormente, los participantes tendrán la oportunidad de crear una máscara dorada personalizada.