Hacia adelante es que es, pues, después de todo el ímpetu de este Delgado siempre ha sido gordo.
Muchos supuestos expertos de internet se han curado en salud diciendo que el experimentado toletero Carlos Delgado ya no da para más, que debe pensar en el retiro, que su carrera se acabó, esto después de un frustrado retorno el año pasado, cuando tras 26 partidos sucumbió de nuevo a un dolor intenso en la cadera. Se dice de todo en ‘Cibernia’: desde que los Angels de Anaheim están interesados en firmarlo ahora que se lastimó Kendry Morales, hasta que si nunca va a regresar y ya empieza a pensar en su vida después del béisbol.
Aunque ya se había operado, Delgado decidió someterse quirúrgicamente a otra intervención, pero esta vez para reconstruir la parte de la cadera que esta afectada, algo por lo que han pasado al menos un centenar de atletas que se han tratado con el doctor Mark Philippon, máximo experto en esta cuestión de reconstruir caderas. Es decir, mientras la gente se pasa hablando por ahí de él, Delgado está enfocado en resucitar su carrera, en regresar antes de que culmine la actual campaña de Grandes Ligas, en darle sus servicios de agente libre a cualquier equipo con esperanzas de postemporada que necesite un bate para impulsar carreras.
“La gente puede hablar, pero nadie sabe qué hay en la olla, solamente la cuchara que la menea”, acotó Delgado, uno de apenas 15 peloteros en batear cuatro jonrones en un partido (septiembre 25, 2003, Azulejos-Rays).
En medio de un duro proceso de rehabilitación en Nueva York, Delgado se escapó a Puerto Rico para ver la familia y tomarse un respiro de lo que ha sido uno de los momentos cruciales en su carrera. De paso, el último hombre en pegar un ‘grand slam’ en el legendario Shea Stadium de Nueva York compartió con Diálogo en una profunda entrevista en donde habló de su carrera como atleta profesional y de la responsabilidad que carga un atleta de alto rendimiento en la sociedad puertorriqueña.
DIÁLOGO: ¿Cómo describirías esta etapa en tu vida, en donde enfrentas el reto más grande de tu carrera, en cuánto a rehabilitar una lesión se refiere?
Carlos Delgado: No es únicamente uno de los retos más grandes dentro del terreno, si no que fuera también. El reto mayor es ponerse en condición, estar saludable para entonces enfrentar el reto de lucir bien dentro del terreno. A nadie le gusta estar lastimado, pero es bien difícil jugar con dolor. Lamentablemente, tuve que someterme a una segunda intervención quirúrgica.
Gracias a Dios yo creo que con esta intervención del doctor Mark Philippon bregamos con la raíz del problema. El doctor Philippon fue el que operó a Alex Rodríguez, y todos sabemos como resultó eso. Lo que pasa es que son operaciones totalmente diferentes, a pesar de ser en la cadera. Las dos en su momento estuvieron bien hechas, pero no me pude recuperar como yo quería. Ahora lo que Philippon hizo fue reconstruir el labrúm, que es el hueso que está entre la cabeza del fémur y el acetábulo. Él selló esa parte de la cadera para bregar con la movilidad. La recuperación ha sido ardua, pero yo voy a mí.
D: Entonces, ¿es viable tu regreso en julio, como se ha especulado?
CD: Yo estoy enfocado en tratar de regresar lo antes posible, pero no me quiero casar con ninguna fecha. Eso fue lo que me paso el año pasado, y salí peor. Si con la bendición de Papa Dios me recupero antes, pues es antes. El estimado, hasta ahora es para finales de julio.
D: Pues vas bastante adelantado, ¿no? Es que hay dos ó tres supuestos expertos de internet y supuestos periodistas deportivos de radio y prensa escrita que ya te han sacado de competencia…
CD: Bueno… yo voy bien. Nadie sabe lo que está en la olla más que el que la menea. Estoy a tres meses desde la operación, que fue el 17 de febrero…
D: Wow, cuentas las fechas y to’… como los presos…
CD: ¡Pues imagínate! ¡Yo, un jibaro de Aguadilla ‘metío’ en (la clínica de Phillippon en) Colorado, con un frío cañón! Allí me quedé nueve semanas, lo que quedaba de febrero, todo marzo y parte de abril. A finales de abril, me fui de (la clínica de Philippon en) Veil a Nueva York, donde hay una clínica de otro ortopeda que cogió un entrenamiento con el doctor Philippon, y cuenta con un área de tratamiento bastante chévere, con gimnasio, piscina. Ya estoy corriendo y haciendo ‘swings’ en caja de bateo, pero todo a medio pocillo, no a impacto completo. Todavía estoy haciendo mucha piscina, muchos ‘drilles’ de béisbol, pero nada de echarle peso encima a la cadera. ¡Es que apenas cumplo seis semanas sin muletas! La primera parte del tratamiento es de dos meses en muletas, muchos ejercicios acuáticos. Ahora estoy entrando en la etapa de que puedo joggear, puedo hacer pesas, pero todo es moderado. Yo espero ya la semana que viene empezar a hacer práctica de bateo en vivo, a full swing, pero todavía estoy a medio pocillo… eso sí, me siento muy bien.
D: ¿Conoces atletas que se hayan recuperado de esta operación y hayan vuelto a producir en alto rendimiento?
CD: Pues fíjate, cuando el doctor me presentó la opción me dio una lista de cómo 160 casos que ha tratado. Me presentó jugadores de balompié y de hockey que han podido recuperarse y retornar a la acción y eso me motivó bastante. Es decir, no estoy dando palos a ciegas. Ahora, en béisbol no conozco a nadie, aunque él ha operado a muchos peloteros, pero no de la cadera. Eso me motiva aún más. El doctor Philippon es un verdadero profesional y las vistas de seguimiento son constantes, no me siento solo en todo esto, aparte de que también mi familia está ahí todo el tiempo.
Tributo de un fanático de los Mets a Carlos Delgado
D: ¿Qué puedes decir sobre tu tiempo con los Mets de Nueva York?
CD: Fue tremenda experiencia. Empezando en el 2006 con los ‘playoffs’, algo que nunca me había pasado. Teníamos un grupo de muchachos buenos y eso de jugar en Nueva York es tremenda experiencia. Tiene sus momentos buenos y malos, pero te hace mejor pelotero y mejor persona, pone a prueba tu carácter, tu fuerza. Nos quedamos cortos en los años después de eso, pero son gajes del oficio. Yo estoy tranquilo de que en ese tiempo yo di lo mejor posible de mí y se trato de ganar todos tus juegos.
Los grandes de los Azulejos de Toronto, entre ellos Carlos Delgado
D: ¿Y con Toronto?
CD: Wow… ahí pasé tanto tiempo. Fue mi primera oportunidad, un verdadero proceso de aprendizaje, donde pude establecerme en la liga como un jugador de primera categoría, donde fui a múltiples Juegos de Estrellas, fue un proceso bien completo y me lo disfrute bastante.
D: ¿Dónde te sientes más cómodo, en la Liga Americana o en la Nacional?
CD: Al principio, durante los primeros 10 años, la Liga Americana era lo único q había experimentado. Cuando llego a la Liga Nacional, entiendo lo que la gente dice, de que se juega diferente, pero todo está en la manera en que se ejecute. Hay gente que dice que en la Nacional hay más estrategias, y uno como purista lo acepta, pero, al fin y al cabo, las múltiples estrategias que pueda haber no te sirven de nada si no ejecutas bien. Eso sí, a mí me gustan más las ciudades de la Liga Americana.
(En la segunda parte de esta entrevista a fondo, Delgado hablará sobre la era de los anabólicos en las Grandes Ligas, de sus estadísticas y el Salón de la Fama y de las responsabilidades que tienen los atletas profesionales con la sociedad puertorriqueña)