Rafael Bernabe y el Partido del Pueblo Trabajador (PPT) se dejan llevar por la lógica de la equidad económica y social.
O sea, en las propuestas del candidato a la gobernación no hay espacio para la privatización, simple y llanamente, porque en Puerto Rico “hay un gran problema de distribución de riquezas”. No pare mucho más, entiende él.
“Las riquezas del país están controladas por el capital externo, que genera ganancias en Puerto Rico y las saca, no las reinvierte. No genera suficiente empleo, no genera suficiente recaudo. Así no se puede sacar al país de la pobreza”, le dijo a Diálogo en una reciente y profunda plática, como parte de la serie de entrevistas de este medio digital a los candidatos a la gobernación.
En un artículo firmado por Bernabe que publicó en 2015 la página del Comité para la Abolición de Deudas Ilegítimas, el investigador de historia y veterano profesor del Recinto de Río Piedras señala que “en la actualidad Puerto Rico tiene una tasa de desempleo de 13%, pero más significativa aún es la tasa de participación laboral: tan solo 40%… Es decir, 60% de la población en la edad de trabajar está fuera del mercado laboral formal, no está ni empleada, ni buscando empleo”.
Durante los últimos diez años, dice el estudioso y aspirante a La Fortaleza, “han desaparecido cerca de 250 mil, o una quinta parte, de los empleos. Desde 1996, hace dos décadas, han desaparecido cerca de la mitad de los empleos en la manufactura, de cerca de 160 mil a menos de 80 mil”.
“Es obvio que el PPD (Partido Popular Democrático) y el PNP (Partido Nuevo Progresista) han aportado a este desastre económico”, le dijo a Diálogo. Se calcula, insiste, “que las riquezas que acumulan las empresas foráneas en Puerto Rico, que salen del país”, ascienden a los $35,000 millones.
“Todos los recaudos del gobierno de Puerto Rico totalizan $9,000 millones. Y se llevan del país $35,000 millones, casi cuatro veces lo que recauda el gobierno local. Logremos que al menos un 10%, que serían $3,500 millones se quede en Puerto Rico. Sería un buen comienzo”, señaló.
De igual forma, estableció, “hay riquezas en manos privadas en Puerto Rico que no se reinvierten, grandes empresas, familias que tienen miles de millones que, o están en el banco que se invierten o las desplazan a otros lugares”.
Ese sector de multimillonarios, que en población Bernabe estima que llega “quizás a uno por ciento”, es “el que controla esos dos partidos (PNP y PPD)”, el que invierte a diestra y siniestra en las campañas políticas en búsqueda de favores gubernamentales, como demuestran los incontables casos de corrupción desde la época de Pedro Rosselló y Víctor Fajardo hasta hoy, con los esquemas de Anaudi Hernández y funcionarios del PPD en la cara de todos.
“Todas estas cosas necesitan la voluntad de tocar los sectores privilegiados. Hay que estar dispuestos a una reforma economista progresiva, ir en esa dirección, y eso solo sucede mediante la unión del sector desposeído, la gran mayoría, los trabajadores, los profesionales, los pequeños comerciantes que han sufrido este embate económico”, articuló.
Bernabe y el PPT recomiendan que se realice una auditoría de todas las finanzas del gobierno, de la deuda y que, “luego de atajar toda la corrupción”, se lidie con la redistribución de las riquezas. Una auditoría ciudadana dijo, es necesaria, por ejemplo, para entonces pensar en una reestructuración de la Autoridad Energía Eléctrica (AEE), atribulada por todos lados, según demostró el histórico apagón masivo del pasado miércoles que dejó sin luz a la gran mayoría de la población del archipiélago de Puerto Rico.
En comunicaciones escritas después del apagón, Bernabe indicó que el incidente “ha confirmado las denuncias que han hecho los trabajadores de la UTIER (Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego) en cuanto a la falta de mantenimiento y el desvío de fondos de la agencia”.
“Los trabajadores de la AEE han denunciado en múltiples ocasiones la falta de mantenimiento en la AEE, pero según las recomendaciones de Lisa Donahue y de los bonistas, estas denuncias se han sido ignoradas”, señaló Bernabe en la mañana del pasado 22 de septiembre, horas después que el país se quedara sin servicio eléctrico tras la explosión de una turbina en la planta de Aguirre.
“La AEE es un tema que hay que abordar de distintos ángulos”, le había dicho Bernabe a Diálogo semana y media antes del nefasto apagón.
“Lo inmediato sería hacer una auditoria ciudadana de todo el funcionamiento de esa agencia, de todos los contratos, los puestos de confianza, todos los mecanismos de adquisición de combustible, de equipo y demás. Todo eso hay que examinarlo de arriba abajo, para eliminar todos los esquemas de corrupción y reducir al máximo los gastos que se van en esos asuntos”, dijo sobre el inicio del plan del PPT.
Bernabe citó como ejemplo de “apertura ciudadana” las investigaciones y auditorías de la Legislatura que “el esquema de corrupción de Petro West”. Como resultado, José González Amador, presidente de Petro West, se expone a 15 años de prisión por varios cargos en su contra.
“Sería un trabajo titánico, pero hace falta esa transparencia. Lo de Petro West también demuestra cómo se ha destruido la autoridad”, dijo. Son necesarias las investigaciones, “mucha gente está dispuesta a decir lo que sucede, pero hay que darle apoyo a la gente que lo dice, que no suceda en un ambiente de persecución”.
Comenzado ese proceso, explicó, “se enfocaría en el costo de la energía para las personas, que no estriba solo en reconstruir la infraestructura”, sino en buscar “cómo logramos acelerar la transición hacia energía renovable, salir de la energía fósil”. Su plataforma propone un enfoque en energía solar, por razones obvias de las condiciones climatológicas de Puerto Rico.
“Pero para eso hay que renegociar la deuda de AEE y la de Puerto Rico y recuperar las ganancias que hoy se fugan. Y hay que exigir también, con mucha fuerza y movilización, que el gobierno de Washington haga esfuerzos que le toca”, con respecto a la distribución responsable de la energía “como se sabe que tiene que hacerlo en todos los Estados Unidos”.
Otro sector donde dijo que es necesario trastocar a sectores económicamente privilegiados es la salud, a la que catalogó como “un negocio en Puerto Rico”.
“Por eso el PPT propone un seguro de salud universal”, y eso es algo, señaló, que incomoda a los que controlan el negocio de los planes médicos.
Reiteró, principalmente, que un voto por su partido y su candidatura sería un voto en contra de la junta de control fiscal, y “decir lo contrario no es correcto”. Desde el inicio de la propuesta de ley que la legislatura federal bautizó con PROMESA (Ley de Supervisión, Administración y Estabilidad Económica de Puerto Rico).
Reconoció también al Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) como la otra opción para la gobernación que comparte esa filosofía, “un partido con el que tenemos muchas coincidencias, propuestas similares, como en salud y economía”, a pesar de que, como colectivo, afirmó que el PPT “no es independentista”, algo en lo que abundó en nuestra entrevista publicada el pasado domingo.
“Ojalá los otros candidatos también estuvieran de acuerdo en oponerse la junta. Ojalá todos los partidos defendieran un seguro universal de salud”, dijo.
- Diálogo: O sea, si usted fuese gobernador, usted no trabajaría con ella…
- Bernabe: El PPT se opone a la junta. Hemos estado en la lucha antes, durante y después.
- Diálogo: ¿Qué va a estar haciendo el PPT en enero?
- Bernabe: Si tú votas por el PPT pueden pasar dos cosas. Una es que gracias al voto suyo, el PPT gane las elecciones. Ahora, si usted vota por el PPT y el PPT no ganó las elecciones, pudiese ser que gane uno de los dos partidos de siempre, lo que, como ya hemos visto, significará más medidas de austeridad, más medidas en contra de la gente. El PPT va a resistir eso que nos viene para encima. Sea para ganar o para resistir, ese voto por el PPT es importante.
Para respaldar estas palabras, Bernabe pasó lista de las causas y resistencias respaldadas por el PPD durante el actual cuatrienio, desde la privatización del Aeropuerto Luis Muñoz Marín en inicios del 2013 hasta el repudio al trastoque “de las pensiones de retiro, la Ley 66, la crudita, las propuestas contra el IVA, los incineradores de Arecibo, tu mencionas algún tema y siempre hemos tenido posturas a favor de la clase trabajadora”.
“Y vamos a seguir después de noviembre”, aseguró.
Si las condiciones del país predijeran ahora mismo el futuro, el terreno luce fértil para que la gente que trabaja y los “sectores desposeídos”, abacorados en unísono, se animen a organizarse y salgan a la calle a protestar. Desde los más jóvenes, con el bajón de salario mínimo a $4.25 la hora, hasta los pensionados públicos al borde del retiro, no mucha gente aguantará el impacto de austeridad que propone PROMESA, expuso Bernabe.
“La junta de control fiscal viene con un agenda de austeridad, recortes, entre otras cosas, en la Universidad de Puerto Rico, más allá de la congelación de fondos que hay ahora. Hay que resistir, en todos los terrenos, tanto en las elecciones como en la calle”, puntualizó.
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