El comienzo de la época navideña, con sus pascuas, luces e historias, se cuela en el Teatro Rodante Universitario a través de la obra “Pastores de la ciudad”, que se presentará del 4 al 7 de diciembre. Cobijados por los árboles de la Plaza Baldorioty de Castro y sobre una estrecha tarima rodante, 21 personajes cobran vida para contar una historia sencilla y juguetona de la lucha entre el bien y el mal.
Escrita por los dramaturgos mexicanos Emilio Carballido y Luisa Josefina Hernández, “Pastores de la ciudad” se inserta en un pueblo en que personajes típicos narran las tradiciones de la época navideña, a la vez que van contando la historia religiosa del nacimiento de Jesús. Entre la vendedora de pascuas, el lustrador de zapatos, mendigos, señoras, niños y animales de granja, el Teatro Rodante explora el género popular de la pastorela.
El director Dean Zayas, en un aparte con Diálogo, mencionó que eligió la obra, aparte de la temática, porque le pareció un montaje accesible para el pueblo, y una buena pieza de iniciación para quienes nunca han rodeado un escenario y han visto un mundo crearse frente a ellos. “Esa fue la idea del Teatro Rodante en su origen, llevar teatro a las comunidades sobre todo a aquellas que nunca veían teatro”, señaló.
La obra, que próximamente se presentará en Culebra, posee una puesta en escena sencilla de fácil movimiento, con la posibilidad de trasladarse a diversos lugares del País. Además, el texto sencillo y la corta duración permite un primer acercamiento al lenguaje teatral.
En un espacio comunal frente a un panel de fondo que detalla las casas coloridas de un pequeño pueblo, ocurre la acción. Se da el intercambio entre diversos personajes, una madre que abandona sus hijos, una vendedora de pascuas que pierde las flores, una sirvienta que debe un dinero a su ama, una vaca que huye con sus corderitos del matadero, entre otras viñetas coloridas, invadidas por el personaje de un curioso Policía con cuernos y cola roja.
Entre el ruido de los motores, las campanadas de la Torre y el telón de fondo de la ciudad, el cuerpo actoral del Teatro Rodante le sirvió al espíritu cómico y lúdico de la sencilla puesta en escena.
“Pastores de la ciudad” es derivado de la pastorela, un género dramático enraizado en el teatro religioso medieval. En las notas al programa, la catedrática del Departamento de Drama Rosalina Perales señala que el género llegó a Latinoamérica como un mecanismo de la Iglesia Católica para evangelizar a la población indígena americana “utilizando elementos de celebración de la cultura indígena como las imitaciones, la música, las danzas y las flores multicoloridas, junto al contenido adoctrinante del teatro religioso cristiano”.
Dentro de la evolución del género, el tiempo le otorgó razgos de cotidianeidad a los personajes de las pastorelas, situándolos en un ambiente y tiempo con los que el público se pudiera identificar. Perales identifica “Pastores de la ciudad”, escrita en 1958, como una muestra de la “clara transformación de los personajes clásicos de la pastorela tradicional y la presencia de la lucha entre los poderosos y los desposeídos”, sirviéndose así de problemáticas sociales contemporáneas.
“Pastores de la ciudad” se presentará nuevamente hoy, sábado, a las 8 de la noche , y mañana, domingo, a las 4 de la tarde.