Sí, en efecto, me quiero graduar. Tras cinco años de estudio, muchas amanecidas y sacrificios, claro que quiero completar mi bachillerato y desfilar dentro de dos meses.
Entonces, pienso en mi sobrino y mi hermanita. Ellos, que me han dicho en repetidas ocasiones que desean estudiar en la UPRRP “cuando sean grandes”. Los mismos que he llevado a recorrer el recinto y a ser oyentes en algunas de mis clases para que conozcan la universidad, se enamoren de aprender y sepan que es posible tener acceso a la mejor educación superior del país. Ahora su sueño, esa meta que les ayudé a trazar, peligra. Por ellos, mi graduación puede esperar.
También pienso en mis estudiantes. Esta semana celebramos que todos los que solicitaron admisión a las distintas unidades de la UPR fueron aceptados. Aplaudimos, los vi reír, les di consejos para cuando fueran ‘prepas’; soñaron, alcanzaron su meta. De pronto, llegó la incertidumbre:
-Maestra, ¿qué va a pasar de aquí a uno o dos años con mi bachillerato y con la UPR?, preguntó una joven, recién admitida a la UPR de Río Piedras.
-Maestra, ¿usted cree que las clases comiencen en agosto?, cuestionó otro estudiante, ahora gallito.
-Maestra, ¿qué sucederá con las unidades más pequeñas?, inquirió un alumno, aceptado en la UPRB.
-Nos resta luchar, dejarlo todo en los portones. Crear propuestas, participar en marchas. Hacernos escuchar y que atiendan nuestros reclamos. Esto es por ustedes, los que están por entrar al sistema UPR y los que aspiran a hacerlo, respondí.
Luego de eso, una nueva jerezana comentó:
-Maestra, usted nos habla mucho de que hay que luchar pero, ¿y su graduación? ¿Cómo se siente al respecto? Estando tan cerca de la meta, ahora no sabe cuándo terminará.
-Mi graduación puede esperar. La meta, mi meta, actualmente es tener una educación pública accesible, comenté.
Sí, en efecto, me quiero graduar; mas no puedo ser egoísta. Así como me he beneficiado de luchas anteriores durante estos cinco años, entiendo que ahora se debe luchar para los que quieran estudiar de aquí a otros cinco años.