Universidad: presente y futuro.

 

¨Pensar la universidad que queremos.¨ – Madeline Román

 

De esto se trata ser universitario, de pensar ¿No? Tal vez este pensar ha sido enterrado bajo arenas movedizas de problemas. Una tumba al pensamiento se cava en la UPR.  Universidad del revolú, de conflictos, de violencia, y para algunos de “politiquerías”. Universidad de conocimientos y saberes que han sido reemplazados por discordias. Entre gritos, piedras, palos, macanas y enjambres judiciales, hemos olvidado su fundamento principal: pensar.

En efecto, con motivo de darle verbo a esta palabra, se celebró en la noche de ayer el conversatorio Universidad: Presente y Futuro en el Ateneo Puertorriqueño.  Varios profesores, moderados por el profesor de ciencias políticas Javier Colón,  se dieron a la tarea de pensar la UPR y su situación desde un plano critico.

Asimismo, estos académicos compartieron sus diferentes ideas acerca de la realidad universitaria del ahora y del desconocido porvenir de la primera institución educativa del País.

Entre los ponentes, el profesor de ciencias políticas Raúl Cotto, analizó el conflicto en el cual se encuentra la Institución, donde criticó al movimiento estudiantil de “abusar de la práctica de la huelga”.

Precisamente, según del experto, el segundo voto de huelga que tuvo el Recinto, mostró “falta de estrategia y táctica dentro de este grupo”.

Añadió que, “abandonando el pensar, los estudiantes han tomado acciones incorrectas y que han perjudicado las victorias establecidas por la huelga del 2010. Al mismo tiempo, opinó que “la presencia de la policía de Puerto Rico o la policía del Partido Nuevo Progresista -según describió- en la Universidad como parte de un orden de la represión, siendo esta antagónica a la misión universitaria por crear conocimiento y promover el estudio”.

Por otra parte, el doctor también observó el problema de la enajenación como eje central, no sólo entre el estudiantado, sino como uno que permea toda la Isla. Como parte de  su análisis, comentó sobre cómo los trabajadores no-docentes permanecen enajenados de la situación y discusión universitaria, no se les considera y a su vez ellos permanecen al margen.

El segundo ponente  fue el profesor Jorge Sánchez del departamento de dermatología del Recinto de Ciencias Médicas, quien de entrada propulsó la pregunta ¿La comunidad universitaria conoce su misión?

Acto seguido, el doctor mencionó que “ante el desviarse de su propósitos y estar inmersa en discordias de división ideológica, la comunidad universitaria es un reflejo la fragmentación ideológica-partidista en la cual se encuentra la población puertorriqueña”.  Mientras que, a referirse al tema de la autonomía universitaria, Sánchez comparó la situación con “una virgen que es constantemente violada y si nuestra institución académica desea tener un futuro, necesitamos participación, diálogo y conciencia”.

Por su parte, la profesora de la facultad de Ciencias Sociales, Madeline Román, comentó  sobre  que como parte de la sociedad del conocimiento la Universidad es un pilar importante. Y es que, comprende que dentro de esta nueva manera de formar sociedad, la universidad se debe de entender como una inversión, en vez de un gasto para el Estado.  

Entiende que la crisis en que se encuentra nuestra institución tiene atributos singulares de corte político, económico y paradigmático.  Al mismo tiempo, Román, comentó que “los catedráticos han pasado a ser profesores tecnócratas, que tienen como fin el atraer fondos económicos, mientras que los estudiantes han pasado ser simples clientes. En resumen, “la experiencia universitaria como un intercambio mercantil”.

Asimismo, la profesora opinó que “se debe de hacer una lectura más compleja de la democracia y que hay que moverse más allá del imaginario político de corte obrerista que impera en el movimiento estudiantil”.

Finalmente, la profesora Luz de Jesús, presentó su perspectiva como economista, en torno a la situación de la UPR dentro del la economía de mercado.  

Según la experta, “uno de los derechos inalienables debe ser la educación y que esta debe ser pública y accesible”.  

A su vez, expresó que la mejor manera de arremeter contra la crisis fiscal en que se encuentra la Institución se basa en defender la fórmula de financiamiento que respalda los fondos universitarios.

Como resultado, la profesora mencionó que es tal vez, “exigiendo lo que ya ha sido establecido, que tal vez podemos luchar por la Universidad que queremos y por esto, la pensamos”.

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