Vladimir Pérez no ‘rapea’ sobre dinero, fama o pistolas.
En cambio, ‘Vladi’ – nombre artístico– elabora música con el objetivo de despertar la reflexión, el análisis y el pensamiento crítico sobre las polémicas que se viven en Puerto Rico y el mundo.
Hurtan nuestra de mano de obra, nos exprimen y ese zumo
reparten en sus bienes, sus mierdas y sus lujos.
Si rompemos ese yugo y el esfuerzo compartimos,
damos el mejor paso en el mejor de los caminos.
Eso es solo un ejemplo de sus líricas, en este caso, sacadas de su sencillo “Coyuntural”.
“Soy un rapero de una isla que es colonia, un país explotado e invadido. Desde aquí yo hago rap porque es la destreza que me permite reflexionar mis pensamientos sobre ese entorno”, expresó el joven natural de Comerío.
A lo largo de su entrevista con Diálogo, el músico de 25 años, egresado de la Escuela de Comunicación de la Universidad de Puerto Rico (UPR), enfatizó que contrario a muchos de sus colegas en el universo musical, nunca ha tenido aspiraciones de explotar su talento artístico con fines comerciales.
“Yo no me he puesto a esperar que alguna disquera quiera apoyarme económicamente”, indicó.
En ese sentido, reconoce que su acercamiento apunta más bien a la necesidad de exponer sus posturas en torno a lo que percibe son las circunstancias de un Puerto Rico oprimido social, cultural, política y económicamente. Un acercamiento que entiende le ha permitido forjar su identidad artística.
“El norte es ver cómo se vincula nuestro rap con la realidad, más que pensar si estamos pega’os o no. Mi rap no está buscando la tendencia comercial que se esté reproduciendo al momento, porque por eso es que los famosos suenan casi todos iguales”, sintetizó.
Cuando era niño, narró, escuchaba raperos como Luis Díaz, 79, Tráfico Pesado, Vico C, entre otros, que le despertaron su interés en esa línea de expresión artística que adoptaría más adelante.
“Es distinto escuchar música comercial que solamente trae contenido mainstream, a diferencia del rap ‘conciencia’ que habla de temas que están pasando en nuestra sociedad”, mencionó.
Considerando las dificultades que enfrentan los artistas independientes en Puerto Rico, muchos le cuestionan si piensa dejar su trabajo y vivir solamente del rap. A esto el joven responde: “Yo vivo del rap porque es parte de lo que me mantiene equilibrado”.
La IUPI influyó en su propuesta
Para Vladi, su ingreso al Recinto de Río Piedras en 2010 como estudiante de comunicación audiovisual fue la chispa que impulsó su carrera artística.
A pesar de que sus comienzos se remontan a sus años de escuela intermedia, no fue hasta ser estudiante universitario que presentó su música en vivo, siendo parte de un concierto estudiantil de la Iupi, durante las navidades del año que ingresó.
Y es que fue precisamente en ese año que la UPR vivió uno de los momentos más intensos en las últimas décadas. La imposición de una cuota de $800 anuales al estudiantado, así como las políticas de austeridad que implementaba a diestra y siniestra el gobierno de Luis Fortuño dieron paso a un proceso de huelga estudiantil que desembocó en decenas de incidentes violentos entre manifestantes y la policía, dentro y fuera de los recintos y unidades.
A Vladi, la austeridad fue algo que lo tocó personalmente.
“[Fortuño] aprobó la Ley 7, botaron a mi madre y yo sentía un coraje particular con la situación del país, así es que se mezcla mi gusto por la rima con mis inquietudes sociales”, dijo.
En la universidad, Vladi comenzó a cantar en vivo, presentándose en diferentes establecimientos y juntándose con otros artistas independientes. Dentro de la institución conoció y trabajó con múltiples dibujantes, fotógrafos, músicos y diseñadores.
“Al llegar al ambiente cultural de Río Piedras, me di cuenta que hay una cultura viva alrededor del recinto que fue gasolina para yo trabajar mi propuesta. Nosotros mismos autogestionamos las producciones. El espíritu de la colaboración es la esencia del underground”, afirmó el cantante.
Por esa línea, Vladi exhortó al público a apoyar y apreciar el arte independiente, en sus diversas manifestaciones, pues no solo en el ambiente comercial se encuentra trabajo de calidad.
Mientras, Vladi no cejará en su esfuerzo de transformar nociones de la realidad a través del rap. A largo plazo aspira a que su legado radique, precisamente, en su capacidad de lograr cambios en las mentalidades y acciones de quienes lo escuchan.
“Me gustaría que las cosas por las cuales me expreso, dejen de pasar. Que algún día no sea necesario hacer rap de protesta”.
Como parte de su interés en las protestas, Vladimir tiene su canal en Facebook, Ojo Vago, donde comparte pietaje de manifestaciones políticas.
Su próxima presentación en vivo será en la actividad Hip Hop Centro, el 3 de junio en Urbe Apie en Caguas.