Marvel, el gigante de los cómics, continúa en su resolución de realizar grandes películas de las historias más populares de sus tiras cómicas. Es por esto que está haciendo maravillosas y fantásticas películas de superhéroes como Iron Man o Thor, de igual modo que está reiniciando y revisualizando (o haciendo un "reboot") la historia de Spiderman, dejando a un lado las tres anteriores. Es por esta misma razón que ha apostado por revivir la saga de Los Hombres X, pero esta vez, sin optar por un reboot completo, sino más bien por un salto temporal al principio del cuento. ¿El resultado? Una entretenida y genial película titulada X Men: First Class.
Habiendo pasado ya por cuatro películas de la franquicia: las primeras dos entregas de la saga de los mutantes superhéroes, X Men (2000) y X Men 2 (2003), el desastre cometido en X Men: The Last Stand (2006) y la abominación que resultó ser X Men Origins: Wolverine (2009); la gente que toma las decisiones en Marvel optó por cancelar la otra entrega de X Men Origins que habían anunciado (la que contaría la historia de Eric Lensherr, mejor conocido como Magneto) y reestructurarla, convirtiéndola en la historia de los Hombres X, narrando el nacimiento de este grupo de superhéroes y la "primera clase de estudiantes" del Profesor Charles Xavier. Con esto, se librarían de continuar el esperpento que habían generado con la tercera entrega y tendrían libertad de explorar nuevos personajes, los vericuetos del pasado de Xavier y Magneto, así como la participación de los mutantes en eventos reales de la historia universal. Tras esta decisión, le dieron el proyecto al director Matthew Vaughn quien ya había probado ser capaz de hacer una muy fresca adaptación del cómic y la novela gráfica con Kick Ass (en el 2010) y Stardust (en el 2007). Vaughn participó igualmente en la elaboración del guión, además de dirigir la película. Luego, le dieron los papeles protagónicos a James McAvoy (quien interpreta a Charles Xavier) y a Michael Fassbender (quien resulta ser el mayor atractivo del film, interpretando a Eric Lensherr). Estas jugadas lograron que X Men: First Class sea la mejor de las películas de los Hombres X y se posicione al lado de Iron Man y Thor.
Admito que aún así tiene sus fallos, pero son pasados por alto ante los demás elementos que la convierten en una experiencia sumamente entretenida, emocionante y sobre todo, cautivadora. En primer lugar, la dirección de Vaughn es impecable y mantiene un gran equilibrio entre el humor y la seriedad, al igual que entre la acción y la trama. First Class es una película compleja que trata el asunto del superhéroe y del mutante como ente rechazado por la sociedad con solemne circunspección, pero no por esto, deja de tener momentos humorísticos de sincero humor. La música del film es genial y complementa la dirección para generar a perfección el clima emotivo y psicológico de cada escena. La historia mutante entremezclada con la crisis de los misiles nucleares en Cuba transcurre de forma armónica y divertida. Pero sobre todo, la actuación de McAvoy y de Fassbender, son el gran punto fuerte del film. Sobre todo la de Michael Fassbender quien sorprende notablemente con su interpretación del vengativo Magneto.
Aunque para ser justos, el papel de Fassbender es el mejor de la película. A ratos, se nota que originalmente este film era X Men Origins: Magneto, especialmente en los momentos en que el maestro del magnetismo actúa sólo, en los que su presencia, fuerza y complejidad se hacen evidentes. Aún así, los otros personajes, aunque no son tan profundos ni son totalmente explotados, son divertidos, frescos y tienen sus momentos brillantes. Entre los jóvenes mutantes destacan Jennifer Lawrence (como una Mystique maravillosa que lamentablemente no pasó más tiempo en pantalla) y Nicholas Hoult (quien hace una memorable interpretación de un Bestia adolescente). Como dato curioso, el personaje de Angel Salvadore (una chica con alas de avispón) es interpretada por Zoë Kravitz, hija del cantante estadounidense Lenny Kravitz.
Por otra parte, el lado negativo de X Men: First Class es, sin lugar a dudas, la caracterización de los villanos. Kevin Bacon interpreta al maquiavélico Sebastian Shaw, sin tener demasiado éxito en dejar de ser Kevin Bacon. Es decir que, para los que hemos visto a Bacon en otras películas, reconocemos la misma actuación en ésta. Hay momentos en los que funciona, pero hay otros en los que llega a aburrir un poco. January Jones interpreta a la Reina Blanca, Emma Frost, sin ninguna gracia ni presencia (una lástima para aquellos conocedores del cómic que esperaban ver la gloria de esta gran villana). Estos dos malvados son acompañados por Janos Quested o Riptide (interpretado vagamente por el actor español Alex González), quien no pronuncia una sola palabra en toda la película y por el misterioso Azazel, quien a pesar de ser interpretado bastante bien por Jason Flemyng y la espectacularidad de la manifestación de sus poderes, comparado con el Azazel de los cómics, no es muy fastuoso.
Este último punto, el de la comparación con la fuente original, es posiblemente uno de los puntos más controvertibles del film. Como bien expresa Mario Alegre en su reseña para Primera Hora, Matthew Vaughn cree que "lo importante no es ser totalmente fiel al texto, sino contar una buena historia con estos emblemáticos personajes". La película es excelente y la historia de mutantes superpoderosos envueltos en el conflicto de la guerra fría es entretenida e interesante, aún cuando no es para nada fiel al cómic en muchos aspectos. En primer lugar, la primera generación de Hombres X, según los cómics creados por Stan Lee y Jack Kirby, presentaban a Cíclope, Jean Grey, Ángel, Bestia y el Hombre de Hielo. De igual modo hay eventos a lo largo del filme que rompen con la continuidad de la línea temporal de las tiras cómicas. Pero en primer lugar, es posible que los realizadores de la película hayan querido obviar la configuración original de los X Men para no volver a repetir a tantos personajes y poder darle importancia a otros. En segundo lugar, Marvel es famosa por la infinidad de universos y líneas temporales alternas que tienen sus diversas historias. Los personajes de los X Men se reinventan y cambian los eventos en cada línea temporal, de modo que mientras en una dimensión es el Profesor X quien forma este grupo de jóvenes mutantes, en otra, ya se encuentra muerto para el momento en el que su mejor amigo, Eric Lensherr (Magneto) es quien los crea para pelear contra el mutante Apocalipsis. Tomando esto en cuenta, ¿qué más da si el film origina una nueva línea temporal para los Hombres X? Si esta dimensión es tan interesante y excitante, bienvenidas sean todas las entregas que estén por venir de esta saga y que la continúen.