Carlos Correa debió haber tenido unos seis o siete años, cuando por primera vez Jossie Alvarado lo vio.
“Llegó al programa de radio de Raúl Cintrón, en Radio Hoy 1210 a.m., en Salinas. Era un fenómeno del que todos los comentaristas deportivos de acá del área sureste comentábamos. Imagínate, a esa edad acababa siempre las temporadas de Pequeñas Ligas con 40, 50, 60 jonrones. Nadie hace eso. ¡Qué clase de fenómeno!”, recordó el periodista Alvarado sobre quien en estos momentos ha tomado la batuta del futuro del béisbol puertorriqueño.
“Entonces, tienes a este chamaquito ahí espigado, con tremendo porte de pelotero, a esa edad, hablando por radio, como todo un profesional. Era bien difícil que no llegara a ser una estrella. Era como ver un monstruo en potencia, como ver un monstruo bueno”, dijo sobre el fenómeno de Santa Isabel.
Si hay alguien que puede hablar con conocimiento de causa sobre la carrera de Correa, ese es Alvarado. Para el que no lo conozca, sepa que este señor es uno de los estadísticos y analistas de béisbol más intrépidos que actualmente existe en la mediática puertorriqueña. Para colmo, sepa que anda cundido de conocimiento sobre todos los boricuas que habitan el Salón de la Fama del béisbol, dónde de aquí a 30 años pudiese entrar Correa. Como todo boricua beisbolero, Alvarado idolatra a Roberto Clemente, pero la cosa va más allá: es uno de los mejores panas de Roberto Alomar y tan reciente como hace una semana tuvo en su programa de radio al también inmortal Peruchín Cepeda, hablando, adivinen de quién… sí, de Carlos Correa.
“Lo más que me impacto que me dijo ‘Peruchín’ fue que nunca había visto a Correa cometer errores mentales. Otra cosa que mencionó es como Correa ha manejado el hecho de ser subido a un equipo contendor, con tan solo 20 años de edad. Es decir, no todo el tiempo sucede que suben a un muchacho de 20 años de edad y en par de semanas ya está de tercer bate en la alineación. Eso a ‘Peruchín’ lo impresionó bastante”, puntualizó nuestro experto.
Alvarado toma un respiro, piensa y prosigue su narración, cual feligrés leyendo alguna lectura en el podio del altar católico durante una misa dominical.
“También dijo ‘Peruchín’ que este es un jugador que a leguas se nota que es pelotero. Para ‘Peruchín’, este es un tipo con porte. Que es un tipo calmado, con mucho control. Que es un tipo que cuando llega a un sitio todo el mundo tiene que mirarlo, porque tiene mucha presencia, que camina como un pelotero, que habla como un pelotero. Correa tiene un piquete ahí que desde que lo ves llegar tienes que mirarlo”, apuntó Alvarado, con la emoción en su voz de quien revela la llegada del nuevo ídolo de un pueblo.
Correa y el día que conmovió a todo Houston
Hablemos ahora de ese “piquete” que mencionó ‘Peruchín’ y que reiteró Alvarado. Transportémonos a poco más de un mes atrás, en la víspera del Juego de Estrellas, cuando Correa realizó una conferencia de prensa en el restaurant Downtown de Hato Rey. Llegó como media hora tarde, pero cuando lo hizo, fue como si el tiempo se detuviera. Y eso, que de béisbol era lo menos que venía a hablar.
“Yo sé lo afortunado que soy, y quiero devolverle a los que no tienen la suerte o las bendiciones que yo he tenido”, le dijo a la prensa puertorriqueña durante aquella tarde. Ese día anunció que realizaría un juego benéfico de golf para ayudar a niños y jóvenes con padecimientos cardiovasculares de la Fundación Gogui, actividad en la que ya comprometió a varios compañeros suyos de los astros, como José Altuve y Dallas Keuchel.
Además, hizo claro cuál es la causa que realmente lo conmueve en Houston, dónde su presencia va más allá del Minute Maid Park.
“Yo sé esa historia, si quieres te la cuento”, le expresó Alvarado, erudito del diamante al fin, a Diálogo.
“Pero primero tienes que entender que todo lo que es Carlos Correa se debe a su sólida base familiar, a los valores que su padre Carlos le ha puesto. Y que todo lo que él ha logrado desarrollar, desde que le descubrieron su gran talento para el juego, tiene que ver con todo lo que tiene a su alrededor, desde su familia hasta sus preparadores físicos”, apostilló.
Con eso ya fuera del medio, Alvarado recordó la conversación que sostuvo con el padre del más brillante astro que en estos momentos tiene Houston.
“En algún momento hablé con su papá, porque salió una información de que le estaba llevando comida a indigentes cerca del parque. Resulta que en una ocasión, ambos salieron juntos del parque, que es en el centro de ‘Downtown’ Houston. Y Carlitos vio a toda esa gente homeless y no pudo aguantarse. Es un muchacho con un gran compromiso con el juego, pero también sus padres le han inculcado un gran compromiso social. Y le dice a su papá: ‘Aquí hay que hacer algo’. Ahí fue que se comunicaron con el Salvation Army y comenzó un movimiento para que junto a la organización de los Astros se atendiera a estas personas menos afortunadas. Y Carlitos si tiene que ir él mismo, él va”, manifestó Alvarado.
Es que es muy grande la empatía que siente Correa por el prójimo, según da fe Alvarado.
“Uno lo ve, él no vacila en decirlo. Él dice: ‘Yo estoy aquí, y estoy haciendo esto, pero estoy muy consciente de lo que pasa a mi alrededor’. No es un atleta millonario normal de 20 años de edad, de esos que tiene la mente la en las guácaras”, puntualizó el allegado a los Correa y maestro de información peloteril.
Hablemos de números
No, Correa no es un atleta millonario normal de 20 años de edad. Claro, que una cosa es fuera del terreno y otra es dentro del terreno. Como cuestión de hecho, sus estadísticas reafirman cuán fuera de lo normal es su habilidad en el campo de juego.
“¿Vamos a hablar de numeritos? Chequéate esto”, comienza a discernir Alvarado, con el entusiasmo de un niño de primaria que cuenta su primer día de clases.
“En estos momentos, pudiera superar el récord de ‘slugging’ para novatos, superando lo logrado por Nomar Garciaparra en 1997. Garciaparra cuando fue Novato del Año en la Americana en aquel año lo hizo con un ‘slugging’ de .534, y Correa hasta el miércoles pasado llevaba ‘slugging’ de .539”, expresó, en alusión a una de las estadísticas ofensiva más pura que tiene el béisbol, que indica cuántas bases el jugador alcanza una vez que conecta la pelota.
“Entonces, ahora mismo, como campo corto, está logrando algo que no se hace en las Grandes Ligas desde 2007. Desde ese año, no había un siore que pegara 15 jonrones y 40 empujadas. El último fue Troy Tolowinsky, que en ese año dio 24 jonrones con 99 remolcadas en 155 juegos. Correa no va a jugar 155 juegos, pero si lo lograse estuviese en camino a dar más de 30 jonrones y cuidado si sobrepasaría las 100 carreras empujadas”, señaló Alvarado.
Y, claro está, abundan las comparaciones con las estrellas más luminosas que ha visto el firmamento de las Grandes Ligas.
“El otro día ESPN lo puso junto a Willie Mays y Frank Robinson en una categoría muy especial. Solamente él, Mays y Robinson han logrado pegar 15 jonrones antes de los 21 años de edad y en menos de 62 partidos. WIllie Mays lo hizo en 1951 y le tomó 55 juegos, Frank Robinson lo hizo en 1956 y le tomó 58 juegos y Correa este año lo ha hecho en 62 juegos”, indicó.
En resumen, Alvarado entiende que no hay forma de que Correa no gane el galardón al Novato del Año, aunque especificó que “cualquier cosa puede pasar en el béisbol”.
“Lo que sí hay que tener presente que ahora mismo, entre los novatos, está entre los primeros tres en la categoría de OPS, que recoge el porciento de llegar a base junto al ‘slugging’, mientras que en empujadas está primero, en jonrones está primero y en ‘slugging’ está segundo. Además, está cuarto en promedio de bateo. Claro, a todo esto hay que agregarle todo lo que el tipo hace fuera del campo, su afán por ser bueno con el prójimo y todo eso”, dijo Alvarado.
Bueno, pero es que Alvarado tiene conocimiento de más para cantar las loas de Correa. ¿Algo más, maestro?
“Dependerá de su salud, pero de aquí a 20 años, yo lo veo con ‘Peruchín’, con Alomar y con Clemente. Creo que puede incluso ser el primer boricua en sobrepasar los 500 jonrones. Pero a mí lo más que me impresiona es el compromiso que él tiene con respecto al juego, y con respecto al prójimo. Estamos ante una muy, muy brillante estrella”, finalizó.
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