África como origen territorial, los rasgos físicos definidos, la vivencia del racismo doctrinario, y una experiencia común con la esclavitud llevan a la raza negra a convertirse en la comunidad afrodescendiente de América. Así lo planteó el escritor y activista costarricense de los derechos humanos, Quince Duncan, como parte de su participación en el Primer Congreso sobre Afrodescendencia en Puerto Rico.
En su conferencia magistral: De raza negra a pueblo afrodescendiente, que ofreció esta semana en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, Duncan estableció que el color de piel o los rasgos fenotípicos no bastan para definir un grupo, sino que también se debe considerar la procedencia o las experiencias en común, que en última instancia llevan a establecer una comunidad, en este caso la negra.
El conferenciante explicó que la raza no es un hecho biológico puesto que no se puede dividir a la humanidad en razas específicamente. Sin embargo, socialmente las razas son reales, así como las consecuencias de pertenecer a alguna de ellas.
“Cuando a tu madre le gritan negra, a tu padre no le dan trabajo o a tu hermano lo meten preso por cualquier razón, los efectos de ser de raza negra son palpables. Esto es parte del racismo doctrinal, el cual fue inventado por las mentes más brillantes de Europa y estableció estereotipos y mitos para hacer creer que las diferencias físicas no eran parte de la diversidad y así justificar el control de todo”, comentó el también profesor de la Universidad Nacional de Costa Rica.
Más adelante, respecto a que en Puerto Rico hay una falta de reconocimiento de las raíces africanas, el escritor costarricense comentó en entrevista que “nadie quiere estar asociado con los perdedores. La historia de la raza negra es de invisibilización y exclusión, por lo que es difícil que la gente se identifique con este sector si lo único que saben es que fue esclavizado. En Puerto Rico no se habla de la familia Niño, de descendencia afroportuguesa, a la que pertenecía el barco la Niña utilizado por Cristóbal Colón. Nadie habla de los afrodescendientes de Puerto Rico que se enfrentaron a los ingleses que invadieron y tomaron San Juan”.
Por tanto, para Duncan el Congreso es pertinente en la medida en que crea conciencia de las aportaciones de los afrodescendientes al desarrollo histórico y social.
Por su parte, el rector del Recinto de Río Piedras de la UPR, Carlos Severino Valdez, reconoció, durante la apertura del Congreso, las aportaciones de los académicos afrodescendientes y recalcó la necesidad de que se reflexione sobre la discriminación racial en la Isla y sobre las acciones para combatirla.
“Este evento es muestra del compromiso de cada uno de los aquí presentes de continuar creando espacios de discusión de primer orden para beneficio no sólo de la comunidad universitaria, sino en especial de toda la sociedad puertorriqueña, del Caribe y Latinoamérica”, expresó Severino.
Según el comunicado de prensa de la UPRRP, también anunció una serie de iniciativas para promover el cumplimiento cabal de la institución con los objetivos del Decenio Internacional de los Afrodescendientes. Entre ellas, se comprometió a apoyar iniciativas curriculares, de investigación y de servicio para adelantar los objetivos del Decenio; para garantizar la continuidad de estos trabajos dijo someterá una resolución al Senado Académico que afirme este compromiso institucional; e instruirá al desarrollo de programas y proyectos acordes con estos objetivos.
Entre otras acciones, se comprometió a la creación del programa ProBono de la Escuela de Derecho para educar, orientar y concientizar por la igualdad racial y propiciar la igualdad en el acceso a la justicia. Asimismo colaborará con la Cátedra UNESCO de Educación Superior en el fortalecimiento de sus intercambios con la Cátedra UNESCO de Senegal y continuará apoyando el proyecto colaborativo del Instituto de Altos Estudios Nacionales de Ecuador, Portland State University y la Universidad de Puerto Rico, en torno a las experiencias educativas de la afrodescendencia en América Latina, entre otros asuntos.
Este evento es partícipe de la Resolución 68237 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que decretó el Decenio Internacional para los Afrodescendientes que comenzó el 1 de enero de 2015 y terminará el 31 de diciembre de 2024 con el tema “Afrodescendientes, reconocimiento, justicia y desarrollo”.
Por último, Duncan destacó que “a lo largo de la historia se han venido acumulando una serie de paras (trabas) provenientes desde la época colonial y que sobre todo se han desarrollado en un contexto de un fuerte racismo doctrinario. Esto ha significado exclusión, invisibilización y marginación para las poblaciones negras a lo ancho y largo del mundo. Por lo que esta declaratoria pone al pueblo negro en el foco para que los gobiernos e instituciones internacionales tengan la oportunidad durante estos 10 años de examinar con cuidado el problema y tratar de ver que se puede hacer en los términos de reconocimiento, justicia y desarrollo”.