Termina agosto, pero como siempre el último reducto veraniego nos deja el menú servido con promesas futboleras de primerísima calidad: la Liga de Campeones de Europa ya tomó forma definitiva. El torneo entre clubes de fútbol más importante del mundo quedó sellado ayer por la noche en Mónaco, y no descansará -salvaguardando la pausa de navidades- hasta que alguien salga coronado en mayo del próximo año en la gran final del Santiago Bernabéu. Al igual que en sus últimas dos ediciones, españoles e ingleses saltan favoritos para avanzar a la siguiente fase de la competición, no sin altibajos y extrañezas. La pelota nunca deja de rodar, y en Europa es un delito descartar a las escuadras alemanas e italianas, pese a que no lleguen en su mejor momento. Además, están los siempre combativos –y sorpresivos- equipos del Este europeo, que este año son muchos y muy buenos. El Grupo A presenta al Bayern Munich (Alemania) y a la Juventus (Italia) como candidatos a las dos plazas que avanzarían a la siguiente fase. Los acompañan el Burdeos (Francia) y el Maccabi Haifa (Israel), equipos peligrosos y que darán batalla pero que carecen de roce necesario como para desbancar a teutones e italianos. Manchester United (Inglaterra) es quizá el único gran favorito del Grupo B. Aunque falta ver si podrán sobreponerse a la pérdida de Cristiano Ronaldo, los “diablos” los lucen superiores – al menos en papel – al CSKA Moscú (Rusia), Besiktas (Turquía) y el Wolfsburgo (Alemania), equipo que la temporada pasada fue dirigido por el“boricua” Felix Magath. Las tres escuadras parten muy parejas en la búsqueda del segundo puesto, aunque quizá los rusos tengan una leve ventaja por el buen fútbol que están desplegando. Remontándonos a las sagas de los 80’s, década en que disputaran partidos inolvidables, llega el Grupo C, comandado -a doble timón- por el Real Madrid (España) y el AC Milan (Italia). Los dos son los máximos ganadores de la Copa. Se conocen muy bien y seguramente los dos pasarán por encima de sus compañeros de grupo, el Marsella (Francia) y el Zúrich (Suiza). El Atlético de Madrid fue quizá el conjunto español más desfavorecido, pues comparte el Grupo D junto al poderoso Chelsea (Inglaterra) y a su victimario del torneo pasado: el Oporto (Portugal). El APOEL Nicosia (Chipre) es el más débil y pinta como el sacrificado seguro. Liverpool (Inglaterra), Lyon (Francia) y la Fiorentina (Italia) disputarán las dos plazas del Grupo E. Ante estas potencias, el debutante Debrecini de Hungría parece tener muy pocas posibilidades. Monarca reinante y -de nuevo- fuerte candidato a repetir el título, el FC Barcelona chocará contra el Inter Milán (Italia) y entre ellos repartirán el primero y segundo lugar del Grupo F para clasificarse. Este duelo presenta el rencuentro de Eto’o y Ibrahimovic con sus antiguos compañeros e hinchadas. El Dinamo Kiev (Ucrania) es un equipo competitivo que podría dejar algún mal sabor de boca a alguno de los gigantes, mientras que el Rubin Kazan (Rusia) mirará desde el fondo a los demás. Con mucha suerte corrió el Sevilla (España), cabeza del Grupo G, pues con tres rivales a modo como Rangers (Escocia), Stuttgart (Alemania) y Unirea Urcicenin (Rumania), no tendrá ningún problema para clasificarse. Aquí, el debutante rumano podría dar la campanada y colarse como segundo lugar. Por último, en el Grupo H, el Arsenal de Inglaterra tiene también un panorama muy cómodo. El AZ Alkmaar (Holanda) y el Olympiacos de Grecia tendrán una lucha férrea por la segunda plaza. Muy complicada luce la posibilidad del Standard Lieja (Bélgica) de colarse. La mesa está servida, los aperitivos y los platos ya se conocen. También los comensales y los chefs. La Liga de Campeones comienza y Europa, junto al mundo entero, disfrutará del mejor fútbol del planeta.