Luego de confrontar una pequeña molestia en un hombro durante el primer set de acción, la puertorriqueña Mónica Puig logró reponerse para derrotar a la china Zheng Saisai, 6-4 y 6-3, y coronarse campeona del torneo Rising Stars en Singapur.
El novel torneo, celebrado en el Singapur Indoor Stadium, forma parte del itinerario que anualmente presenta la Asociación de Tenis de Mujeres (WTA, por sus siglas en inglés), es parte de las Finales WTA en Singapur y presenta a las cuatro jugadoras jóvenes preferidas de la afición, según seleccionen a través de las redes sociales cibernéticas.
O sea, ya de por sí, había sido un logro para Puig haber llegado hasta allá. De hecho, fue el empuje de los boricuas en las redes sociales lo que ayudó a que Puig pudiese presentar su #PicaPower en el torneo Rising Stars. El sentimiento es mutuo.
“En mi mente, espíritu, corazón, cuerpo, en todo, estoy muy orgullosa de representar a mi País”, dijo Puig recientemente en una entrevista con ESPN. “Para cualquiera que pregunte, soy 100% puertorriqueña”, afirmó.
Parece que para Puig, que en mayo pasado alcanzó la posición #41 en el escalafón de la WTA —lo más alto que ha logrado— esa inspiración borincana le hace bien. Llegó al Rising Stars de Singapur con el machete amolao’.
Fue la única en el round robin de cuatro jugadoras que no perdió un partido y avanzó a la final con foja de 3-0. Zheng, su rival en la final, arribó con marca de 2-1, mientras que la estadounidense Shelby Rogers finalizó el certamen con récord de 1-2 y Zarina Diyas, de Kazajistán, no logró triunfos en tres salidas.
Claro, no fue fácil alcanzar el título con una jugadora como Zheng en la final. Y mucho menos fue sencilla la trayectoria hasta el mismo. El domingo pasado, incluso, Puig, de 21 años de edad, había derrotado a la fogosa estadounidense Rogers, con un marcador de 6-3, 6-7(4) y un maratónico set final de 11-9.
Además, Puig tuvo que fajarse el pasado fin de semana con Zheng en un duelo que llegó a ronda de desempate. Aquí le presentamos parte de lo que sucedió en ese partido previo a la final.